La Contentura y la importancia de practicarla.
Por: Jason Vásquez.
Dice el Real Diccionario de la Lengua Española que la palabra «Contentura» deriva etimológicamente de latín Contentus cuyo significado es alegría o satisfacción.
Si partimos dese este punto entonces un individuo que practica su Contentura interna tiene una alta probabilidad de ser una persona satisfecha y feliz.
¿Se puede ejercitar la Contentura como si se tratara de un músculo?
Por supuesto que se puede, es más me atrevería a sugerir que debería ser prioridad para nuestro día a día.
Sucede que hemos relegado nuestra felicidad a uno de los últimos lugares en nuestra lista de cosas importantes, lista que en sus puntos prioritarios está el comprar, el tener, el conseguir, el producir, el acumular.
Y es probable que haya personas que sientan que les causa placer o felicidad
comprarse algo nuevo, desde ropa hasta, ¿porque no? Un auto de agencia por el cual han estado ahorrando y es una meta importante.
Intentaré explicarlo mejor:
Un auto nuevo si es un proyecto integral por el cual has trabajado y puesto el corazón y el sudor en ello, es Contentura.
¿Un carro sacado a plazos e intereses agiotistas?
Es estrés en cómodas mensualidades.
¿Entiende la diferencia?
Todos tenemos una amiga que cada que está deprimida va a comprar algo para sentirse mejor, y todos también la hemos visto deprimirse más cuando no le alcanza para pagar el estado de cuenta de su tarjeta de crédito ( ese plástico tan amigable en apariencia pero que carece de sentimientos.)
Comprar y adquirir nos produce una Contentura temporal, que se acaba al día siguiente cuando ese par de zapatos van a parar al closet, obligándote a sumergirte en un tobogán Helter Skalter del más mísero y ruin consumismo.
No, la Contentura real radica en pequeñas pero grandes acciones que marcan la diferencia, que cambian nuestros días y lo más importante, modifica el día de los demás…
Pondré dos ejemplos que me ocurrieron esta mañana, Tomé un taxi para ir a la terminal de autobuses y el taxista abrió la cajuela de manera descuidada y rutinaria, inmerso en su mundo de trabajo y laburo, antes de meter mis maletas al compartimento le extendí la mano, le di un apretón cordial acompañado de una de mis mejores sonrisas de esas de comercial de dentrifico, el señor bastante extrañado se sentía apenado y confuso, entonces aprovechando su desconcierto le solté un par de preguntas a quemarropa, ¿Cómo le va esta mañana?
¿todo bien?
Y entonces sonrío.
Cuando llegamos a mi destino le deje el cambio de lo que marcaba el taxímetro y los dos nos fuimos llenos de Contentura.
Me costó un apretón de manos y veinte pesos hacer mi primer ejercicio del día.
El segundo fue decirle a la chica que recibía los boletos del autobús que me parecía que hacía un trabajo extraordinario, y era verdad atendía a cada pasajero con una sonrisa y una amabilidad que iba más allá de la obligada por su empresa.
¿Resultado? Una sonrisa enorme y un brillo en sus ojos formidable.
¿Entiendes como un detalle aparentemente tan insignificante para la mayoría como un apretón de manos, un abrazo o mostrar interés en los demás puede hacer una enorme diferencia en nuestra rutinaria vida?
No se necesita ser un profesional de la comedia, o un payaso para hacer feliz a los demás.
( sin embargo ayuda mucho el oficio)
-Basta con ceder el paso mientras manejamos, sonreírle al conductor de la ventana de al lado y olvidando nuestra vergüenza que no sirve para nada, preguntarle si todo está bien, le prometo que
Esa persona llegara a su casa y le platicará a su mujer, ¿sabes?
Hoy me pasó algún muy extraño…
Haga algo estupendo como sacar ganchos ala calle, colgar esa ropa que ya no utiliza y poner un cartel que diga: ¿la necesitas, llévatela?
Yo vi esto en una calle de Puebla y no sabe la enorme sonrisa que se me dibujo en la cara al saber que somos muchos más los que creemos y que estamos dispuestos a modificar nuestro entorno enojado y viciado por una más cálido y humano.
¿Qué hago yo para practicar mi Contentura?
-Hago voluntariado con una nariz roja en cualquier hospital, asilo u orfanato del puerto.
-Visito de imprevisto a cualquiera de mis amigos que esté pasando por un mal momento, o simplemente me hago presente y le hago saber que lo extrañaba y que es importante para mí.
– viajó!
-Me pongo la mejor actitud antes de abrocharme el cinturón y manejar.
-Sonrío
-Agradezco
-Ayudo en lo más mínimo, ( no sabes lo especial que haces sentir a la gente cuando le das la mano para bajar del autobús, o le ayudas a cargar la maleta a cualquier persona)
-Soy cordial, ( buenos días, buenas noches, vecina se ve más delgada, ¿esta haciendo ejercicio?)
-cocinar para mis amigos y la gente que amo.
-decirles lo importante que son para mi vida.
Uffff hay tantas cosas que me hacen feliz que no terminaría esta lista.
¿Se da cuenta cómo algo que comienza con mera actitud se convierte en una necesidad por sentirse mejor?
¿En dónde puedes encontrar tu propia Contentura?
¿En mirar como crecen los chicos, en tomarte un día libre y agarrar la pinta para ir a ese lugar que tanto extrañas, en salir a mojarte bajo la lluvia, en compartir una charla, en llevar café y pan para las familias de los enfermos, en hacer cosas desinteresadas por alguien más?
Sin duda alguna la máxima fuente inagotable de Contentura proviene del dar, del compartir, del desprenderse.
Tiempo, abrazos, amor, solidaridad, trabajo social, interés, dar hasta que duela decía la
madre Teresa.
Y lo más importante, donde quiera que usted encuentre su Contentura, cerciórese de que no la vuelva a perder.
Porque me queda claro que toda esta gente que apuesta por los cambios no los hacemos para ser buenas personas, si no para ser personas felices.
Y sucede que cuando te decides a ser una persona feliz, la Vida te sorprende haciéndote una mejor persona.
Namaste.
Finales de Junio, entre Puebla y DF a un día del cumpleaños de mi padre.
( otro motivo más para mí Contentura)
Blogguer: De las cosas sencillas.
Twitter: @jasonpata
Contacto: jasonvasquezmarketing
Del autor:
Jason Vásquez es:
Clown ( conocido), Músico,
( desafinado), Dramaturgo
( incipiente), Escritor ( de baqueta)
y Director del Festival internacional de Circo, Comedia y Artes de la Calle VIDAFEST y de la Compañía Pata de Perro, desde hace veinte años.
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