La muerte a los 77 años de Terry Jones, el miembro de los Monty Python que dirigió las películas del sexteto, es una noticia trágica para todos los aficionados a la comedia. Pero no es una sorpresa. El actor, guionista y director sospechaba que sus días estaban contados desde 2014, cuando notó que tenía problemas para recordar sus diálogos durante las actuaciones en directo que le reunieron con sus antiguos colegas.

Jones debutó en solitario como director en 1987 con Servicios muy personales, prolongando su filmografía con títulos como Erik el vikingo, Viento en los sauces y Absolutamente todo, su último trabajo tras la cámara.

Nacido en Colwyn Bay (Gales), Jones había conocido a su compañero ‘python’ Michael Palin durante sus estudios en Oxford. Junto a él y otros futuros miembros de la troupe, trabajó como guionista y actor en programas cómicos de la BBC hasta que, en 1969, revolucionó la comedia moderna con Monty Python’s Flying Circus. Cuando el sexteto se lanzó a la pantalla grande, suya fue la responsabilidad de dirigir sus películas: Los caballeros de la Mesa Cuadrada (1975, junto a Terry Gilliam), La vida de Brian (1979) y El sentido de la vida (1983, también con Gilliam) llevan su firma.

En 2015, un diagnóstico de demencia frontotemporal confirmó sus temores, mientras que su aparición en los BAFTA 2016 para recoger un premio honorífico, acompañado por su hijo, mostró la gravedad de su estado. En 2017, su amigo Michael Palin (compañero de estudios en Oxford antes que hermano pythoniano) reveló al público que Jones ya no era capaz de hablar.

Un final indigno, si nos preguntan, para un miembro de Monty Python que se caracterizaba (todavía más que sus compañeros) por una cultura vastísima y una inteligencia prodigiosa. Sin ir más lejos, el hecho de que los Monty Python debutasen en largo con Los caballeros de la Mesa Cuadrada (codirigida por Jones y Terry Gilliam) no se debió a un capricho del destino, ni tampoco a que el grupo tuviese ganas de mostrar a caballeros franceses lanzando vacas con catapulta.

Esto se debió, más bien, a que Jones era un apasionado de la historia medieval, una rama del saber sobre la que dirigió y presentó documentales tras la disolución de los Python. Sin ir más lejos, Terry Jones’ Medieval Lives le granjeó una nominación a los Emmy en 2004. El año anterior, su libro Who Murdered Chaucer? examinaba la rivalidad entre el autor de los Cuentos de Canterbury y el obispo Thomas Arundel. Todo muy sesudo, como vemos.

https://www.lavanguardia.com/cultura/20200122/473068289061/muere-terry-jones-monty-python.html
https://www.eldiario.es/cultura/cine/Terry-Jones-estrella-Monty-Python_0_987601717.html
https://cinemania.20minutos.es/noticias/terry-jones-el-python-tras-la-camara/